Actualmente, el Networking es clave para las relaciones laborales. Pero, ¿qué es realmente el Networking? Siempre ha estado presente entre nosotros y consiste en la mera creación de una buena red de contactos para crear oportunidades de negocio. Se trata de algo imprescindible para el mundo empresarial y emprendedor.
¿Qué tipo de contactos?
No es fácil conseguir contactos de calidad y, a veces, no parece importante mantener el trato con personas que aparentemente no nos podrán ayudar en un futuro. Pero hacer esto es precisamente lo que nos limita las oportunidades de trabajo. No se sabe dónde llegarán estas personas más adelante o a quiénes podrán conocer. Por eso, es vital saber reconocer a los contactos potenciales.
¿Qué se debería hacer para generar buenas conexiones?
1. Mostrarnos con profesionalidad y seguridad. La primera impresión es la más importante, como la carta de presentación a una empresa. Controlar lo que se publica en las redes sociales es fundamental. La más relevante es LinkedIn, en la que mantener una actividad frecuente y compartir artículos de interés será trascendental.
2. La creación de un blog propio. La elaboración de una marca personal plasmada en un blog con temas relacionados con nuestro respectivo empleo ayuda a dar más visibilidad a las ideas. Podemos añadir el currículum y actualizarlo, y compartir todo en las redes sociales.
3. Mantener relaciones personales. No basta únicamente con agregar en LinkedIn a las profesionales sino, también, interactuar con sus publicaciones. Además, mandar mensajes de vez en cuando o, incluso, citarse para hablar.
4. Usar tarjetas de visita. Repartir tarjetas con nuestro nombre y contacto nos resultará de utilidad, repartiéndolas cada vez que conozcamos a una persona nueva.
5. No acercarnos a los contactos solo cuando necesitemos un favor. Mostrar interés en cualquier situación será beneficioso en nuestra red de contactos, lo que nos llevará a la fidelización de una ayuda mutua.